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CAZALLA DE LA SIERRA: MAGIA NATURAL
Un paseo por Cazalla
El Tiempo en Cazalla de la Sierra
Cazalla de la Sierra es una localidad de la provincia de Sevilla, en la comunidad autonoma de Andalucía, España. Está localizado en la Sierra Norte y forma parte del Parque Natural de la Sierra Norte de Sevilla, limitando con la comunidad autónoma de Extremadura.
Este municipio se incluye en la comarca de la Sierra Norte sevillana y forma parte del ámbito del Parque Natural del mismo nombre.
En el año 2008 contaba con 5.047 habitantes. Su extensión superficial es de 352 km² y tiene una densidad de 14,13 hab/km². Sus coordenadas geográficas son 37º 55' N, 5º 45' O. Se encuentra situada a una altitud de 600 metros y a 89 kilómetros de la capital de provincia, Sevilla.
Los primeros habitantes de la zona datan del neolítico y el calcolítico, como lo atestiguan diferentes restos arqueológicos. Sobre una antigua fortificación cartaginesa, los romanos fundan la población de Callentum que con la llegada de los árabes, pasa a denominarse Castalla, siendo conquistada por las tropas cristianas a mediados del S. XIII.
La localidad alcanza su esplendor en los siglos XVI y XVII, llegando a convertirse en residencia del rey Felipe V a principios del S. XVIII.
La aparición de estelas funerarias en las proximidades de la iglesia de la Consolación hace pensar en la existencia de un primitivo fuerte visigodo sobre el cerro del Castillo y de una necrópolis en su falda norte. Pero es bajo la dominación musulmana cuando el asentamiento se configura como núcleo urbano. En un primer momento se reutilizan los materiales visigóticos en la fortificación del cerro. Ya en época almohade, se construye la alcazaba y se formaliza un núcleo residencial hacia el este, que se extiende hasta la actual calle Arenales. Constituye un recinto fortificado alargado de este a oeste y limitado al sur por los escarpes topográficos y al norte por la calle Teniente López Cepero.
El recinto cuenta con varias puertas: la del norte, que conduce a la alcazaba y que origina en su exterior la plaza del Arrabal (actual plaza de España), punto desde el que partirá el desarrollo de la ciudad medieval cristiana; y la puerta de Azahín, situada al este, y en torno a la que surgirá el arrabal del mismo nombre.
En el S. XIV se realizan importantes reformas en la fortaleza almohade y se construye la iglesia de Consolación. Durante el S. XVI y la primera mitad del XVII se produce un fuerte desarrollo, llegando el núcleo hasta el límite natural que por el norte representa el hoy desaparecido Arroyo de Olivillas.
Historia de Cazalla de la Sierra
Tal vez siguiendo los valles fluviales del Viar y del Huéznar y procedentes de las terrazas del Guadalquivir, hicieron su aparición en nuestras tierras los primeros grupos de individuos pertenecientes al género «homo».
Los indicios más remotos de su presencia hasta ahora encontrados, parecen pertenecer a grupos de primitivos cazadores que utilizaron ya como habitación las Cuevas de Santiago, en la orilla cazallera de la Rivera de Benalija. Dichos indicios se refieren a dos cuchillos de 7 cm. longitud, una astilla tallada y una punta del tipo «musteriense». De estos restos, hallados a finales del pasado siglo, nos dio cuenta D. Feliciano CANDAU, habiendo sido catalogados, según este autor, en el Museo de Historia Natural de Sevilla con los números 76, 119, 111, y 72, respectivamente.
Estos objetos, y siempre según el Sr. CANDAU, fueron encontrados en niveles bastante superficiales del suelo de la cueva. A la vista de estos datos, sólo podemos arriesgarnos a afirmar que hombres del Paleolítico Medio o Superior habrían habitado territorios que comprenden hoy el término municipal de Cazalla de la Sierra.
Las noticias se hacen más seguras y fiables para la siguiente etapa del Neolítico. Ello es debido a los trabajos realizados por el Departamento de Arqueología de la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad de Sevilla, bajo la dirección de Dª Pilar ACOSTA, en el yacimiento de la Cueva Chica de Santiago.
Los resultados obtenidos en el estudio del mencionado yacimiento han contribuido a formular, según la directora de las excavaciones, un nuevo planteamiento sobre los inicios del Neolítico en el Sur peninsular. Según los datos proporcionados por las estratigrafías de ésta y de otras cuevas (Nerja, Dehesilla, etc.) parece necesario concluir que en el VI milenio (5.940 a.C. es la fecha aportada por el C-14), si no antes, se inicia una civilización de productores, que poseen muy tempranamente unas cerámicas con decoración de relieves y de tratamiento a la almagra, que no tienen, al parecer, relación alguna con el Neolítico cardial de otros lugares de la Península.
Este neolítico de las Cuevas irá evolucionando durante el V y IV milenios a.C. hasta ser suplantado paulatinamente por el Calcolítico con la aparición de la metalurgia del Cobre en un momento, que según los análisis del C-14, tendría lugar a finales del IV milenio a.C.
Existen restos de épocas muy antiguas tal y como muestran los hallados en las cuevas de Santiago, correspondientes a las culturas Neolíticas y Calcolítica, con sepulcros y dólmenes, hachas, punzones y otras herramientas.
Con la denominación romana se le llama Callentum. Escasos y dispersos son los restos pertenecientes a esta época, lo que prueba que la población no se encontraba concentrada, sino distribuida en núcleos de poca entidad. La mayor parte de las piezas encontradas son tégulas, ladrillos y fragmentos de terra sigillata. A orillas de la ribera del Huesna, en el Santuario de Ntra. Sra. del Monte, Patrona de la Ciudad, existió un pedestal de estatua con inscripción, en honor del emperador Caracalla, dedicado a la República de los Reginenses, y cuya fecha debe localizarse en el año 213 d.C. Dos lápidas sepulcrales de finales del siglo V, pertenecientes a dos niños, nos dejan constancia del paso de la época visigoda.
Los musulmanes la llamaban Castalla, que quiere decir Ciudad Fuerte. De esta época se conservan lienzos de la muralla del castillo, dos puertas de herradura y el trazado de los barrios de Azahín y El Castillo, construido éste último a los pies de la muralla. Fernando III la conquista en el año 1.247, y en el 1.253, Alfonso X concedía al Consejo de Sevilla por término, entre otros lugares, a Cazalla, que el 21 de Noviembre de 1.260, y por privilegio del mismo monarca, pasaba a poder del Arzobispo D. Remondo y del Cabildo Catedralicio.
Esta medido debió dar origen a los dos Cabildos pues, más tarde, el 16 de Diciembre de 1.279 y 11 de Enero siguiente, dos nuevos privilegios del citado Alfonso X, ratifica la permuta celebrada entre ambos Cabildos sobre la villa y castillo de Cazalla, que vuelve a poder del Concejo, cediendo éste a cambio la villa y castillo de amonaster.
En toda la Baja Edad Media, Cazalla ocupó un lugar importante en la defensa del Reino de Sevilla de los ataques del vecino reino portugués y, en el siglo XV las luchas entre las casas de Guzmán y Ponce de León, dejan de sentir sus efectos en la villa. En los siglos XVI y XVII adquiere mayor importancia por su gran riqueza en vinos y aguardientes que se exportaban a Indias. Fue residencia veraniega del rey Felipe V y su corte desde el 13 de Junio al 20 de Agosto de 1.730.
Lugares de Interes de Cazalla de la Sierra
Iglesia de Nuestra Señora de la Consolación [editar]Iglesia parroquial que aglutina dos proyectos inacabados. Su factura tiene origen en el siglo XIV, de estilo mudéjar, alargándose la obra y decoración hasta el XVIII, combinando renacimiento y barroco. La única autoría conocida se debe al maestro de obras Pedro Francisco López en el siglo XVIII, y siendo atribuido el proyecto renacentista (iniciado en 1538) a Diego de Riaño. No obstante, autores como José Hernández Díaz, alertando de la muerte de Riaño cuatro años antes del inicio de la obra, atribuyen la planta clásica del templo a Diego de Siloé, o como obra temprana de Andrés de Vandelvira,[2] último autor éste con proyectos donde pueden encontrarse evidentes paralelismos como la iglesia del Antiguo Convento de Santo Domingo de La Guardia de Jaén.
Cartuja de Cazalla de la Sierra
La Cartuja de Cazalla de la Sierra, se encuentra situada a cinco kilómetros de la población, en un terreno levemente montañoso, tiene su origen en la última parte del siglo XV y es un magnífico ejemplo de los monumentales conjuntos arquitectónicos en los que se desarrolló la vida de esta Orden. Aunque su historia como establecimiento cartujo concluyó en el siglo XVIII, la realidad actual de sus restos permite una aproximación a los momentos de mayor esplendor.
Otros monumentos de interés
Convento de Madre de Dios, construido en el siglo XV, claustro de estilo renacentista
Convento de San Francisco
Monasterio de Santa Clara
Ermita de Ntra. Sra. del Carmen
Convento de San Agustín
Iglesia de San Benito, de estilo gótico mudéjar y con torre triangular
Ermita de Ntra. Sra. del Monte
Gastronomia de Cazalla de la Sierra
El plato típico de la localidad sin duda alguna es el cerdo ibérico, que enriquece de manera especial la mesa y aporta una alimentación fuerte y sabrosa, pero tampoco podemos olvidar otras clases de carne que junto con el cerdo ibérico son los platos estrellas como el cordero y las carnes de caza: jabalí, venado, perdices, conejos, etc., principalmente asados o en calderetas. En el caso del cerdo la calidad de las chacinas es insuperable.
Otros platos tradicionales son las migas, el gazpacho, los espárragos trigueros, las setas en todas sus variedades, así como las trufas, collejas, berros, tagarninas, etc. que son el complemento vegetal idóneo de nuestra gastronomía. A ellos se suman productos hortícolas que regados por manantiales puros, cultivan hortelanos y pequeños propietarios, obteniendo así productos de primera calidad y biológicos de gran valor nutritivo. No podemos olvidar los dulces de horno y sartén como pestiños, roscos, flores, gañotes, torrijas, mantecados, alfajores, tortas de almendra, etc. que tienen sus orígenes recetarios en la cultura musulmana y en la tradición de estos pueblos de la sierra.
Cazalla fue un importante centro productor de vinos, llegando a convertirse en el principal exportador de este producto al Nuevo Mundo, cuya fama quedó reflejada en obras de Cervantes, Lope de Vega y Mateo Alemán. La pérdida de importancia del vino de Cazalla se compensó en el siglo XX con la comercialización de los aguardientes. Quince fábricas dedicadas a la producción de aguardiente llegó a tener Cazalla (Anís Corona, Ideal, La Cepa, Torre del Oro, etc.), de las que sólo sobreviven dos: anís “El Clavel” y anís “Miura”. Tal fue el prestigio y la difusión que alcanzó el producto que en muchos lugares de España la gente da al aguardiente el nombre genérico de Cazalla.
Fiestas de Cazalla de ls Sierra
Feria
15 de Agosto
Nuestra Señora del Carmen
16 de Julio
Ayuntamiento de Cazalla de la Sierra
Plaza Doctor Nosea, 1
41370 - Cazalla De La Sierra
Tel: 954 884 236
Oficina de turismo
Contacto
Plaza Mayor, s/n
41370 Cazalla de la Sierra
954 88 35 62
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Martes y miércoles de 10:00 a 14:00 h
Jueves de 10:00 a 14:00 y de 18:00 a 20:00 h
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Domingos de 11:00 a 13:00 h
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