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Carnaval l'Escala
España - Ruïnes d' Empúries / L'Escala
La Escala (oficialmente y en catalán, L'Escala) es una localidad catalana de la comarca del Alto Ampurdán en la provincia de Gerona, en la comunidad autonoma de Cataluña (España). Aquí se hallan las conocidas ruinas de Ampurias.
La Escala, población marinera, situada en una zona privilegiada en el sur del Golf de Roses y en el centro de playas y calas, nos ofrece paisajes y puntos de interés, como núcleos modernos cerca del mar, el casco antiguo, el pueblo medieval de St. Martí d'Empuries. Además es un lugar ideal para la práctica de todo lo que esté relacionado con el mar y el sol.
Es un pueblo dedicado tradicionalmente a la pesca, y, actualmente centra su actividad en el turismo.
Podemos empezar visitando los principales lugares y monumentos históricos de la población, como la Iglesia de Sant Pere (del S. XVIII),
el museo-archivo Victor Català, o el “Afolí de Sal” (depósito de sal del S. XVII, reconocido monumento histórico en el 1.984); y pasar por otros pequeños pueblos de carácter rural y fortificado, como el pueblo de Cinc Claus (con diversas Ermitas Románicas).
No podemos dejar de ver, a pocos kilómetros del pueblo de Sant Martí d'Empúries, el importante y reconocido conjunto arqueológico: Las Ruinas d'Empúries, lugar ideal para disfrutar de un paseo al aire libre en un marco de gran belleza.
Aprovechamos la estancia en L'escala para disfrutar de la importante oferta gastronómica que nos ofrece, basada principalmente en la cocina tradicional, donde no faltará en ningún momento el pescado.
Podemos alternar las visitas más culturales con otras opciones que la villa nos ofrece, como hacer una excursión en barco, practicar todo tipo de deportes, como la vela o el submarinismo, o, simplemente, pasar un agradable día en las playas de arena fina de Sant Martí.
L'Escala no solo ha sabido conservar unos espléndidos parajes naturales, sino también ha mantenido sus tradiciones y fiestas populares, como el Festival Internacional de Música de l'Escala, que tiene lugar durante los meses de Julio y Agosto en el recinto arqueológico d'Empúries; o la Feria Greco-Romana, con el famoso Mercado Histórico, el último fin de semana de Junio, en L'Escala, donde nos encontramos inmersos en la época clásica juntamente con los personajes que lo interpretan y los productos que ellos nos ofrecerán.
Historia de L´Escala
Este pueblo de pescadores se creó hacia el siglo xv; cuando el puerto de Ampurias fue cubierto por la arena sus habitantes se desplazaron hacia la actual situación. Gracias a la prosperidad de la pesca el núcleo se fue expandiendo.
En los años cincuenta recibió el impacto del turismo y cambió por completo, ahora es un importante núcleo turístico que se ha expandido hasta los límites del municipio.
L'Escala contiene en su término municipal las ruinas de Empúries, puerta de entrada de la cultura y civilizaciones grecorromanas en la Península Ibérica a partir del siglo VI a.C. El territorio, poblado desde la Prehistoria, recibió el impacto de una cultura superior que transformaría de cuajo sus cimientosfundamentos.
Un siglo después de la desaparición de la casa condal de Empúries -según Pella y Forgas-, a mediados de s.XV, y cerca de lo que fue la primera capital, un pequeño barrio de pescadores empezaba a expandirse gracias al impulso de comercio marítimo.
L' Escala empieza a aparecer en los textos escritos a partir del siglo XVI como un pequeño puerto de pesca y cabotaje dependiendo de la vecina villa de Empúries. Su utilización como puerto, sin embargo, es bastante más remota. Su nombre -del latín Scala-, que fue muy común a toda el área mediterránea, designa un puerto o muelle, refugio habitual de embarcaciones. La dependencia hacia Empúries se irá volviendo durante los siglos XVII y XVIII en beneficio de l'Escala. El año 1680 los vecinos del "puerto de l'Escala de la villa de Empúries" -que ya forman un barrio de 80 habitantes- consiguen tener iglesia propia, y el 1766 l'Escala se convierte en villa y cabezajefe de municipio.
La causa principal es el extraordinario crecimiento demográfico -de 390 habitantes en 1718, pasa a 1.383 en 1787-, favorecido por una inmigración comarcal muy elevada, atraída por los puestos de trabajo que generan la aduana marítima - el Alfolí de la sal-, la pesca, los astilleros, la salazón de anchoa y sardina, el cultivo del arroz y de la viña, la exportación de vino y los oficios que se van creando en abrigo de la actividad industrial. Es lo que hará apuntar en su diario al viajero Zamora en 1789: "Sus vecinos trabajan en todos ramos, ganan buenos jornales y no hay pobres".
El censo de 1806 da a 1.600 habitantes. El de 1857, 2.574, y el de 1877, sólo 2.607 habitantes, a causa de la mortalidad provocada por las epidemias producidas por el cultivo del arroz y el cólera. La economía se irá manteniendo, hasta bien entrado el siglo XX, básicamente dedicada a la pesca y el cultivo de la viña, con una población que oscilará, hasta 1960, en torno a los 2.500 habitantes.
Al principio de siglo, se inicia una actividad política y cultural notable: es la época del Ateneo de Arte y Cultura, del Ateneo Víctor Catalán, del Centro Juventud, que harán florecer el teatro, las coblas de sardanas, los Juegos Florales ... La guerra civil restañará todo este movimiento y l'Escala vivirá uno de los episodios más trágicos de su historia: el bombardeo de la villa por parte de la aviación fascista en las postrimerías de la guerra, que provocó a uno vigésimo de muertos de población civil.
A la década de los sesenta un fenómeno nuevo hará dar un vuelco a la economía: el turismo. Las pequeñas industrias locales irán desapareciendo y la mano de obra llenará las demandas en la construcción, el comercio y una vieja industria reatrevida a partir de la creación de la denominación de calidad la salazón de anchoa. La población irá en aumento hasta los 9.855 habitantes actuales, exceptuando los meses de verano, en qué sobrepasa los 50.000.
Lugares de Interes de L´Escala
No podemos presentar el municipio de L'Escala sin mencionar las Ruïnes d'Empúries, situadas a escasos dos kilómetros de St.Martí d'Empúries y que reciben miles de visitas cada año no sólo por entendidos en arqueología sino por todo aquel que desee disfrutar de un paseo al aire libre en un marco de gran belleza.
Mucho menos conocido es el pequeñísimo pueblo de Cinc Claus, fuera de las rutas turísticas, sin asfaltar y rodeado de campos, situado ya cerca de Vilademat posee una de las ermitas románicas más importantes de la zona.
L'Escala ofrece toda la infraestructura necesaria relacionada con el turismo siendo de gran importancia la oferta gastronómica en especial la cocina tradicional dónde nunca faltará el pescado.
El visitante podrá realizar excursiones en barco por la Costa Brava, practicar deportes como la vela o el submarinismo, realizar visitas culturales o simplemente disfrutar de las playas de arena fina de St.Martí.
Gastronomia de L´Escala
El pueblo pesquero de La Escala, en el Alto Ampurdán catalán, ha sido de siempre un lugar privilegiado para la pesca de la anchoa, por ello, desde tiempo inmemorial, tienen fama los salazones que se elaboran con este pescado.
A partir de anchoas frescas seleccionadas, saladas y aromatizadas con hierbas y otras especias y condimentos autorizados, se produce esta salazón que debe tener un periodo de maduración y curación de dos meses como mínimo, antes de ser envasada. Se comercializa en envases con sal, tal y como se han conservado inicialmente, o bien ya limpias y puestas en botes de cristal con aceite, a punto para comer.
Temporada: El momento óptimo para la pesca de la anchoa son los meses de julio a septiembre, cuando el agua está menos fría. Una vez envasadas, se conservan con todas sus propiedades durante unos seis meses.
Fiestas de L´Escala
Y es que en L'Escala se ha sabido conservar no sólo unos espacios naturales y un urbanismo típicos de la Costa Brava, sino que también ha sabido mantener tradiciones y fiestas populares que lejos de utilizarse como pretexto turístico están fuertemente arraigadas entre sus habitantes. Un buen ejemplo de ello lo constituyen la Festa de Ntra.Sra.
Del Carme patrona de los pescadores, que se celebra el 16 de Julio y que representa un homenaje a la vejez dónde el visitante podrá disfrutar y participar de la procesión que lleva la virgen a la iglesia de Sant Pere.
O su Festa Major del 2 al 6 de Septiembre dónde se vive con especial pasión la Sardana, el baile tradicional de Catalunya.
Otras festividades interesantes aunque de carácter más turístico son La Festa de la Sal habitualmente en Octubre donde se muestra al visitante los oficios tradicionales relacionados con la pesca, en la que también participa la población y la Festa de l'Anxova donde podrá degustar las internacionalmente conocidas anchoas de la Escala.
Durante los meses de verano todos los miércoles a las 10 de la noche una orquesta (cobla) toca sardanas en la platja, y espontáneamente se organizan corros dónde todo el mundo está invitado a participar
Ajuntament de l'Escala
C/Pintor Joan Massanet, 34
17130 - L'Escala
Telf. 972 774 848
Fax. 972 774 284
La Escala, población marinera, situada en una zona privilegiada en el sur del Golf de Roses y en el centro de playas y calas, nos ofrece paisajes y puntos de interés, como núcleos modernos cerca del mar, el casco antiguo, el pueblo medieval de St. Martí d'Empuries. Además es un lugar ideal para la práctica de todo lo que esté relacionado con el mar y el sol.
Es un pueblo dedicado tradicionalmente a la pesca, y, actualmente centra su actividad en el turismo.
Podemos empezar visitando los principales lugares y monumentos históricos de la población, como la Iglesia de Sant Pere (del S. XVIII),
el museo-archivo Victor Català, o el “Afolí de Sal” (depósito de sal del S. XVII, reconocido monumento histórico en el 1.984); y pasar por otros pequeños pueblos de carácter rural y fortificado, como el pueblo de Cinc Claus (con diversas Ermitas Románicas).
No podemos dejar de ver, a pocos kilómetros del pueblo de Sant Martí d'Empúries, el importante y reconocido conjunto arqueológico: Las Ruinas d'Empúries, lugar ideal para disfrutar de un paseo al aire libre en un marco de gran belleza.
Aprovechamos la estancia en L'escala para disfrutar de la importante oferta gastronómica que nos ofrece, basada principalmente en la cocina tradicional, donde no faltará en ningún momento el pescado.
Podemos alternar las visitas más culturales con otras opciones que la villa nos ofrece, como hacer una excursión en barco, practicar todo tipo de deportes, como la vela o el submarinismo, o, simplemente, pasar un agradable día en las playas de arena fina de Sant Martí.
L'Escala no solo ha sabido conservar unos espléndidos parajes naturales, sino también ha mantenido sus tradiciones y fiestas populares, como el Festival Internacional de Música de l'Escala, que tiene lugar durante los meses de Julio y Agosto en el recinto arqueológico d'Empúries; o la Feria Greco-Romana, con el famoso Mercado Histórico, el último fin de semana de Junio, en L'Escala, donde nos encontramos inmersos en la época clásica juntamente con los personajes que lo interpretan y los productos que ellos nos ofrecerán.
Historia de L´Escala
Este pueblo de pescadores se creó hacia el siglo xv; cuando el puerto de Ampurias fue cubierto por la arena sus habitantes se desplazaron hacia la actual situación. Gracias a la prosperidad de la pesca el núcleo se fue expandiendo.
En los años cincuenta recibió el impacto del turismo y cambió por completo, ahora es un importante núcleo turístico que se ha expandido hasta los límites del municipio.
L'Escala contiene en su término municipal las ruinas de Empúries, puerta de entrada de la cultura y civilizaciones grecorromanas en la Península Ibérica a partir del siglo VI a.C. El territorio, poblado desde la Prehistoria, recibió el impacto de una cultura superior que transformaría de cuajo sus cimientosfundamentos.
Un siglo después de la desaparición de la casa condal de Empúries -según Pella y Forgas-, a mediados de s.XV, y cerca de lo que fue la primera capital, un pequeño barrio de pescadores empezaba a expandirse gracias al impulso de comercio marítimo.
L' Escala empieza a aparecer en los textos escritos a partir del siglo XVI como un pequeño puerto de pesca y cabotaje dependiendo de la vecina villa de Empúries. Su utilización como puerto, sin embargo, es bastante más remota. Su nombre -del latín Scala-, que fue muy común a toda el área mediterránea, designa un puerto o muelle, refugio habitual de embarcaciones. La dependencia hacia Empúries se irá volviendo durante los siglos XVII y XVIII en beneficio de l'Escala. El año 1680 los vecinos del "puerto de l'Escala de la villa de Empúries" -que ya forman un barrio de 80 habitantes- consiguen tener iglesia propia, y el 1766 l'Escala se convierte en villa y cabezajefe de municipio.
La causa principal es el extraordinario crecimiento demográfico -de 390 habitantes en 1718, pasa a 1.383 en 1787-, favorecido por una inmigración comarcal muy elevada, atraída por los puestos de trabajo que generan la aduana marítima - el Alfolí de la sal-, la pesca, los astilleros, la salazón de anchoa y sardina, el cultivo del arroz y de la viña, la exportación de vino y los oficios que se van creando en abrigo de la actividad industrial. Es lo que hará apuntar en su diario al viajero Zamora en 1789: "Sus vecinos trabajan en todos ramos, ganan buenos jornales y no hay pobres".
El censo de 1806 da a 1.600 habitantes. El de 1857, 2.574, y el de 1877, sólo 2.607 habitantes, a causa de la mortalidad provocada por las epidemias producidas por el cultivo del arroz y el cólera. La economía se irá manteniendo, hasta bien entrado el siglo XX, básicamente dedicada a la pesca y el cultivo de la viña, con una población que oscilará, hasta 1960, en torno a los 2.500 habitantes.
Al principio de siglo, se inicia una actividad política y cultural notable: es la época del Ateneo de Arte y Cultura, del Ateneo Víctor Catalán, del Centro Juventud, que harán florecer el teatro, las coblas de sardanas, los Juegos Florales ... La guerra civil restañará todo este movimiento y l'Escala vivirá uno de los episodios más trágicos de su historia: el bombardeo de la villa por parte de la aviación fascista en las postrimerías de la guerra, que provocó a uno vigésimo de muertos de población civil.
A la década de los sesenta un fenómeno nuevo hará dar un vuelco a la economía: el turismo. Las pequeñas industrias locales irán desapareciendo y la mano de obra llenará las demandas en la construcción, el comercio y una vieja industria reatrevida a partir de la creación de la denominación de calidad la salazón de anchoa. La población irá en aumento hasta los 9.855 habitantes actuales, exceptuando los meses de verano, en qué sobrepasa los 50.000.
Lugares de Interes de L´Escala
No podemos presentar el municipio de L'Escala sin mencionar las Ruïnes d'Empúries, situadas a escasos dos kilómetros de St.Martí d'Empúries y que reciben miles de visitas cada año no sólo por entendidos en arqueología sino por todo aquel que desee disfrutar de un paseo al aire libre en un marco de gran belleza.
Mucho menos conocido es el pequeñísimo pueblo de Cinc Claus, fuera de las rutas turísticas, sin asfaltar y rodeado de campos, situado ya cerca de Vilademat posee una de las ermitas románicas más importantes de la zona.
L'Escala ofrece toda la infraestructura necesaria relacionada con el turismo siendo de gran importancia la oferta gastronómica en especial la cocina tradicional dónde nunca faltará el pescado.
El visitante podrá realizar excursiones en barco por la Costa Brava, practicar deportes como la vela o el submarinismo, realizar visitas culturales o simplemente disfrutar de las playas de arena fina de St.Martí.
Gastronomia de L´Escala
El pueblo pesquero de La Escala, en el Alto Ampurdán catalán, ha sido de siempre un lugar privilegiado para la pesca de la anchoa, por ello, desde tiempo inmemorial, tienen fama los salazones que se elaboran con este pescado.
A partir de anchoas frescas seleccionadas, saladas y aromatizadas con hierbas y otras especias y condimentos autorizados, se produce esta salazón que debe tener un periodo de maduración y curación de dos meses como mínimo, antes de ser envasada. Se comercializa en envases con sal, tal y como se han conservado inicialmente, o bien ya limpias y puestas en botes de cristal con aceite, a punto para comer.
Temporada: El momento óptimo para la pesca de la anchoa son los meses de julio a septiembre, cuando el agua está menos fría. Una vez envasadas, se conservan con todas sus propiedades durante unos seis meses.
Fiestas de L´Escala
Y es que en L'Escala se ha sabido conservar no sólo unos espacios naturales y un urbanismo típicos de la Costa Brava, sino que también ha sabido mantener tradiciones y fiestas populares que lejos de utilizarse como pretexto turístico están fuertemente arraigadas entre sus habitantes. Un buen ejemplo de ello lo constituyen la Festa de Ntra.Sra.
Del Carme patrona de los pescadores, que se celebra el 16 de Julio y que representa un homenaje a la vejez dónde el visitante podrá disfrutar y participar de la procesión que lleva la virgen a la iglesia de Sant Pere.
O su Festa Major del 2 al 6 de Septiembre dónde se vive con especial pasión la Sardana, el baile tradicional de Catalunya.
Otras festividades interesantes aunque de carácter más turístico son La Festa de la Sal habitualmente en Octubre donde se muestra al visitante los oficios tradicionales relacionados con la pesca, en la que también participa la población y la Festa de l'Anxova donde podrá degustar las internacionalmente conocidas anchoas de la Escala.
Durante los meses de verano todos los miércoles a las 10 de la noche una orquesta (cobla) toca sardanas en la platja, y espontáneamente se organizan corros dónde todo el mundo está invitado a participar
Ajuntament de l'Escala
C/Pintor Joan Massanet, 34
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